El oasis urbano de Xochimilco recibe el máximo galardón en paisajismo de la Sociedad Americana de Arquitectos Paisajistas.
Xochimilco gana el máximo galardón de paisajismo de la ASLA
El icónico paisaje de Xochimilco sigue destacando a nivel internacional, ahora recibiendo el prestigioso premio ASLA (Sociedad Americana de Arquitectos Paisajistas). Este galardón reconoce el diseño sostenible del sitio, un verdadero oasis urbano que ha logrado conjugar historia, naturaleza y modernidad.
El proyecto de Xochimilco, conocido por sus tradicionales chinampas y canales, ha sido clave para preservar la biodiversidad del área. La Sociedad Americana de Arquitectos Paisajistas destacó la capacidad de Xochimilco para adaptarse a las necesidades de la ciudad de México mientras conserva su esencia natural. El diseño combina sostenibilidad y la protección de los recursos hídricos, lo que ha sido un factor determinante para otorgarle este prestigioso premio.
“Un modelo de urbanismo verde”
“Xochimilco es un claro ejemplo de cómo el paisajismo puede integrarse armónicamente con la urbe,” comentó uno de los jueces del premio ASLA, quien elogió el enfoque de este espacio. “Su diseño no solo embellece el entorno, sino que también resuelve desafíos ambientales.”
Este reconocimiento internacional pone de manifiesto el esfuerzo por mantener las tradiciones vivas, mientras se enfrenta el reto del crecimiento urbano en la CDMX.
¿Qué es un premio ASLA?
El premio ASLA es uno de los reconocimientos más importantes en el ámbito de la arquitectura paisajista, otorgado por la Sociedad Americana de Arquitectos Paisajistas a proyectos que destacan por su innovación, sostenibilidad y contribución al entorno. Desde su creación, estos premios han servido para visibilizar trabajos que combinan creatividad y responsabilidad ambiental, marcando un estándar de excelencia en el diseño de espacios exteriores a nivel global.
En ediciones anteriores, el premio ASLA ha sido otorgado a proyectos de gran impacto, como el renombrado High Line en Nueva York, un parque elevado que transformó una antigua línea de tren en un oasis urbano, y el Millennium Park en Chicago, que revitalizó una zona industrial para convertirla en un espacio cultural y de esparcimiento. Estos proyectos, al igual que Xochimilco, no solo embellecen el entorno, sino que también responden a las necesidades de sostenibilidad y urbanismo moderno.
Cada año, la ASLA busca destacar ejemplos de cómo la arquitectura paisajista puede generar cambios positivos en las ciudades, desde la creación de áreas verdes accesibles hasta la conservación de ecosistemas únicos. El reconocimiento a Xochimilco confirma que el compromiso con el medio ambiente y la integración de prácticas tradicionales siguen siendo esenciales para el futuro del diseño paisajista.